El kiwi, una fruta tropical ácida conocida por su color verde vibrante, ha encontrado una aplicación interesante en la elaboración de cerveza. Con un perfil de sabor distintivo que combina notas dulces y ácidas con toques de cítricos y frutas tropicales, el kiwi puede elevar el sabor de la cerveza a nuevas alturas. Sus características únicas influyen en el sabor al agregar una acidez refrescante y un sabor afrutado brillante que puede complementar o realzar otros sabores presentes en la cerveza.
El proyecto Vamos a Beer surgió de un grupo de personas con almas inquietas, quienes nunca lograban encontrar una forma de viajar que les resultara adecuada. Buscaban una experiencia caótica dentro del orden, económica sin renunciar a ciertos lujos, disfrutando tanto del día como de la noche, de la naturaleza y de la ciudad, y, sobre todo, explorando cada rincón para no dejar nada sin descubrir. Para ellos, una de las partes más importantes en sus viajes de Vamos a Beer es, sin duda, la cerveza. Sin descuidar la gastronomía, sus viajes son altamente calóricos, pero están muy bien compensados con una intensidad viajera que los lleva a regresar más en forma de lo que partieron. Sus viajes exigen, al menos, caminar 25 km, hacer al menos 5 paradas para probar platos y cervezas locales, y como máximo, descansar 8 horas diarias. Mucha de la información que comparten no está contrastada con fuentes fiables. Incluso es posible que se inventen alguna cosa, porque consideran que es más importante parecer que sabes algo, que el saber en sí. Invitan a disfrutar de este pequeño blog, pero, como todo lo bonito en esta vida, aconsejan no tomárselo muy en serio. Además, desde 2021, han lanzado su propia marca de cervezas solidarias y desde 2023 han abierto sus propios Taprooms, donde es posible probar sus birras.
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